Para mucha gente, la cocina es el centro de la casa, y la estancia del hogar donde más tiempo pasan. No solo para cocinar: es el punto de encuentro por las mañanas para desayunar, y en muchas ocasiones también para el resto de comidas.
Ahora que la época navideña se acerca, la cocina es el lugar que concentra los preparativos de estas fechas; por eso la distribución de la cocina ha de ser completamente funcional, cómoda y, para que estos dos requisitos se den, la iluminación adecuada es fundamental. Todos los diseñadores de interiores coinciden en este punto.
Aprovechamos la experiencia que diseñadores de interiores e iluminadores nos ofrecen para trasladarte los siete consejos ineludibles para iluminar de manera eficaz una cocina.
1. Las luces colgantes deben colgar alrededor de 100 centímetros sobre la isla o la mesa de la cocina
Las lámparas colgantes ofrecen la luz en la estancia a un nivel más general que los empotrados en el techo, lo que permite que haya una iluminación general más equilibrada y se añada un valor visual y estético mediante el diseño de la luminaria. Aunque depende del gusto de cada uno, así como de las dimensiones de la cocina, la mayoría de expertos coinciden que la separación ideal entre la mesa de la cocina y la lámpara colgante es de 100 centímetros.
De esta manera, la lámpara no estará en la línea de visión de las personas que estén en la cocina o transiten por ella. Una buena opción que aúna estilo, diseño e iluminación equilibrada son las lámparas con forma de tambor en tonos oscuros, que nos ofrecerán por otro lado una eficaz iluminación dirigida sobre el techo, frente a las lámparas que brillan hacia todas direcciones.
2. La cocina se ha convertido en algo más que un espacio para la preparación de alimentos.
Es muy importante que la iluminación esté orientada tanto a trabajar en la cocina como a ofrecer un ambiente agradable y amigable. Cuando tengas invitados o des una fiesta, es muy probable que todo el mundo acabe pasando por la cocina.
Hay que evitar las superficies que sean excesivamente brillantes, y tener en cuenta un truco adicional: en la medida de lo posible, que todas las luces sean regulables para que la iluminación pueda ajustarse a las necesidades específicas de cada momento. Es habitual que la cocina no esté situada en una estancia de grandes dimensiones, por lo que la posibilidad de disminuir los niveles de iluminación una vez que la preparación de alimentos está hecha es muy interesante.
3. Tres niveles de luz: luces empotrables, luces bajo los armarios y luces colgantes.
Para lograr una combinación adecuada de iluminación de las áreas de trabajo y luz ambiental, la manera más sencilla de conseguirlo es jugando con tres tipos de iluminación: las luces empotrables, las luces para poner debajo del área de trabajo y la iluminación colgante. Cada momento del día requiere una iluminación: Manipular los alimentos precisará luz de acento en el área de trabajo y un espacio iluminado de manera homogénea hasta el último rincón; tomar un café en la mesa de la cocina una luz más íntima, y desayunar en familia, por ejemplo, una combinación de ambas.
4. Cocinas con luz natural: centremos el acento
Si se tiene la suerte de tener una cocina bien iluminada, una idea es poner estantes flotantes, usar armarios abiertos o armarios con puertas de vidrio y montar luces de tira LED en la parte posterior de los estantes. Esto crea un hábil efecto de luz en la pared posterior del armario que resalta los objetos en los estantes.
5. Los empotrables son tus amigos
La iluminación empotrada en el techo es mejor para la iluminación general de la habitación y combate el resplandor y las sombras. Es especialmente útil en áreas de paso y/o difíciles de iluminar.
Gracias a la tecnología LED, ahora hay empotrables ajustables en intensidad y en ángulo de aberturas pequeñas, por lo que no es necesario hacer un enorme agujero en el techo. También se pueden usar en áreas de tránsito y áreas de paso, como pasillos, y el espacio entre la isla y el fregadero de la cocina. Además, son excelentes para las zonas de trabajo en la cocina.
6. Las luces sobre la encimera te facilitarán la vida
Para la iluminación de tareas sobre las encimeras, se pueden usar tiras de LED, o empotrables debajo del armario. Por lo general, se montan detrás de la tabla, por lo que se quedan ocultos a la vista y no deslumbran, pero la luz se dirige hacia el área de trabajo.
7. En lo que respecta a luces colgantes, menos es más
La iluminación de la cocina en lo que respecta a lámparas colgantes ha de tender al minimalismo: una sola luminaria colgante en la cocina, ya sea sobre una isla o mesa, luces integradas debajo de los armarios como iluminación de acento y empotrables en las áreas intermedias.